domingo, 24 de octubre de 2010

Opinión pública.

De camino a la academia todas las mañanas en el sendero aparecen unos pequeños pájaros y les he puesto un nombre: los pájaros callejeros. Estos, al sentir la presencia de una persona que pasa alzan vuelo. He intentado no interrumpir su actividad y cuando veo a uno lo esquivo, sin embargo alza el vuelo. De ahí se puede deducir que los pájaros reaccionan obedeciendo a un patrón de prevención: alzan el vuelo y cuando no hay presencia alguna, vuelven a su actividad en el lugar que estaban. ¿Por qué esa reacción? Porque sus ancestros les enseñaron que las personas a menudo dicen: “más vale pájaro en mano que cien volando” y por eso huyen de los seres con manos, aunque tengan buenas intenciones como las mías. También debe ser que el noticiero que ven les informa acerca de la extinción de algunos compañeros de su especie y los invitan por medio de campañas de prevención a alejarse lo más posible de los seres con manos. Una persona me preguntó: ¿por qué las palomas de las plazas no alzan el vuelo cuando las personas caminan entre ellas? Ellas ven otro noticiero fue mi respuesta. Como gran deducción tendremos que las aves están fuertemente influenciadas por las noticias que ven y escuchan, además que entre ellas las noticias vuelan.